jueves, 24 de mayo de 2007

Me cuenta mi querido amigo Aurelio Javier, que conoce una familia ,muy ligada a la ciencia, que tomó hace años la determinación de poner a todos sus hijos los nombres de la tabla periódica de los elementos químicos ,y que los chicos están encantados ,tanto que se lo pusieron a sus hijos, y estos a la siguiente generación ,y ahora los niños para aprender a formular solamente con recordar los nombres de la familia lo bordan.El ejemplo ha cundido y ahora unos amigos han decidido poner a sus hijos los nombres de las capitales del mundo y piensan optimistas que en pocas generaciones completaran el mapa ;).,

3 comentarios:

Crispal dijo...

Una vez conocí a una chica que se llamaba Argelia. No es una capital, pero ¿tendría algo que ver con esto que nos cuentas? ¡Qué interesante! ;-)

Anónimo dijo...

Posiblemente sea así.Muy amable e interesante tu comentario.Gracias

Anónimo dijo...

Sé de un tal Mendeleiev, un tal Nobel y un tal Einstein, que reclaman que los elementos Mendelevio, Nobelio y Einstenio vienen de sus nombres.
Creo que mienten, ¿y vosotros?
Porque está claro que nadie le pondría ese nombre a sus hijos ;)