La mascota ideal

Neodimio lleva meses buscando mascota, porque él adora a los animales, pero al mismo tiempo es un hombre muy ocupado así que la decisión no era fácil.
Al principio, pensó en las clásicas mascotas del tipo: perro, gato, peces, pájaros..., pero a todas ellas aunque le gustaban les veía problemas, los perros por lo de los tres paseos diarios, los gatos por lo de los veraneos que no les suelen admitir en los hoteles, los pájaros les ocurría lo mismo y los peces para transportarlos era tarea difícil ...
Así que Neodimio que no se rinde jamás siguió buscando y buscando, como si se tratara de acertar con el detergente, y por fin lo encontró la solución era: un insecto, el insecto resulta fácil de transportar, de alimentar, se pasea sólo y casi nunca se pone enfermo.
La idea era buena pero había que seguir matizando, y matizando matizando encontró la solución definitiva, lo que necesitaba Neodimio era: una abeja.
La abeja es independiente, trabajadora como él mismo, tiene muchas amigas, puedes viajar con ella a todas partes, y además, te regala miel, es perfecta.
Así las cosas, Neodimio comenzó a estudiar el lenguaje de las abejas, luego habló con ellas y le ofreció a una irse a vivir a su jardín, la abeja aceptó encantada, pero le advirtió que como todo el mundo sabe las abejas son muy solidarias y con ella irían 23 abejas más, su familia más próxima,
ahora están todos felices, y es que en cosas tan importantes como elegir mascota hay que saber acertar.