Reencuentros

Desde siempre en todos los países del mundo las familias tienen por costumbre reencontrarse en determinadas fechas.Así dicho la cosa pinta bien incluso emocionante, pero luego como en todo llegan los matices y como bien dice Vanadio "la realidad se impone testarudamente".
Vanadio durante el resto del año lleva una vida tranquila o por lo menos lo intenta pero cuando se aproxima la reunión familiar su estado de nervios crece directa y proporcionalmente a medida que pasan las horas.Lo primero es que ponerse por que como en todas las reuniones hay que ir acertado ya que según una ley no escrita que nunca falla si te equivocas en el atuendo eso puede costarte muchos años de bromas que por supuesto quedan inmortalizadas en fotos y vídeos para que así puedan reírse de ti varias generaciones.
Una vez que has conseguido acertar en ese tema cosa nada fácil y que te puede dejar sin dormir durante días ya solo tienes que ocuparte de todo lo demás es decir llevar algo estupendo que a todos emocione y sorprenda y además llevar preparado un sinfín de gracejos e historias apasionantes para que la reunión no decaiga y memorizarlos con naturalidad para que resulten espontáneos y ganarse así a los allí presentes.
Pero aún no está hecho todo ahora quedan los regalos siempre hay alguien que compra una mierdecilla y queda fenomenal y tú a lo mejor dejas tiritando la tarjeta y solo sacas un gracias forzado.
Una vez terminada la tarea hay que dar el último paso y Vanadio sabe bien que este es crucial y consiste en enterarse donde es la reunión y confirmar que ese año si que se celebra para que no nos ocurra lo mismo que a él que un año no se enteró.
Y si todo esto sale bien ánimo pero no bajar la guardia que al año que viene viene más.