domingo, 24 de junio de 2007

Esclavos de la publicidad

Vivimos unos tiempos raros , Unuvio no es ajeno a lo que le rodea, y observa escandalizado como los medios de comunicación, los comercios, nos acosan cada día con sus marcas , todo tiene marca y como todo tiene marca todo es susceptible de ser publicitado los niños no piden leche con cacao piden directamente un "colacao", en la farmacia no se pide ácido acetilsalicílico se pide "aspirina" si vas a una fiesta a nadie se le ocurre decir que quiere zarzaparrilla dulce con burbujitas y algo más, pide directamente una coca-cola, los niños y niñas del mundo visten, calzan y juegan con marcas, en los informativos se hacen constantes pausas para la publicidad, la publicidad cambia el sentir, pensar y actuar de una sociedad, y nos crea una necesidad tan imperiosa de tener lo que nos presentan, que si no lo tenemos seremos unos desgraciados de por vida no hay salvación, es tener o morir. Todo este spech que dió Unuvio en la universidad del sur con motivo de su último viaje, tuvo precisamente que ser interrumpido en 16 ocasiones para meter la publicidad de los patrocinadores, y como Unuvio no es idiota y detesta perder el tiempo, se fue hasta mejor ocasión, y aprovecho para ir a los sitios de moda para comprar algo de marca de recuerdo para familia y amigos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

hola amigos es cierto que la publicidad penetra profundamente en nosotros, la marca se graba en nuestras mentes y la recordamos y deseamos poseerlas, consumirlas y soñamos con sus promesas,¿que pasa cuando se vuelve algo crónico, como la tos?